Historia


En su familia no existían antecedentes relacionados con el automovilismo. Sin embargo, desde temprana edad, el joven paisa demostró una fascinación innata por la velocidad, los motores y todo lo relacionado con el mundo automotriz, a pesar de las dificultades económicas que implicaba esta afición.

Desde los seis o siete años, Felipe manifestaba un gran interés por participar en carreras de karts. La alta inversión que requería esta disciplina lo llevó a recurrir a los simuladores, donde pudo desarrollar sus habilidades y adquirir los conocimientos básicos del automovilismo durante varios años.

Los videojuegos le permitieron sumergirse en el mundo de la competición automovilística, alimentando su pasión desde la infancia. En una feria, su talento al volante llamó la atención de un desconocido, quien le obsequió un volante de carreras para consolas, incentivándolo a continuar participando en competencias virtuales, donde comenzó a destacar.

En 2016, su dedicación a los simuladores rindió frutos. Durante las 6 Horas de Bogotá, uno de los eventos automovilísticos más importantes del país, Felipe participó en un concurso de simulación organizado por Renault. Su excelente desempeño le valió la oportunidad de realizar una prueba real en el vehículo más rápido del equipo.

Un par de días después, Gil se halló al lado de cinco pilotos ya profesionales y se consideraba "solo un pelado que se ganó un concurso", según sus propias palabras. Sin embargo, al finalizar la jornada, se convertiría en el protagonista.

"Ese día se metió en la cabeza que era como en el simulador y quedó a tres décimas del récord que tenía del auto y un segundo más rápido que todos ellos. Eso fue un boom y lo catapultó para que saltara al mundo real y otros equipos le dieran la oportunidad de correr y mostrarse", indicó.

A partir de ese momento, la carrera de Felipe Gil fue en alza y se convirtió en uno de los pilotos más destacados de Antioquia y del país.

En el año 2020, corrió las '6 horas de Bogotá', donde logró ser el ganador en Catherham y alcanzó dos terceros lugares en la general y la ST.

Mientras que en las carreras virtuales, logró coronarse cam- peón en Ecuador, Panamá y subcampeón en Jamaica. Estos títulos le permitieron clasificarse a diferentes competencias, que en caso de poderse realizar, lo llevarían a México y a Estados Unidos.

Por: Duver Alexander Pérez